sexta-feira, setembro 26, 2008

sexta-feira, setembro 19, 2008

Guarda do meu irmão?

Serei eu a ASAE do meu irmão? parafraseando o primeiro homicida caim quando Deus pergunta por Abel.

terça-feira, setembro 09, 2008

Rivendell Mordor Speech

+ Coisas giras


Quem está cheio de si, não pode amar

"No os dirijáis a los ricos: de ordinario les falta la verdadera caridad y la fidelidad. He aquí la pobreza: Los pobres y los ricos son desiguales. Ahora bien, lo sabéis, sólo hay amor entre los iguales. No existe, pues, verdadero amor entre los ricos y los pobres, porque a los primeros les falta la fuente de donde brotan el amor y la entrega verdaderos. El rico casi siempre da por algún interés. Por la limosna quisiera ganar el cielo o alejar de sí las penas del infierno. Ahora bien, esta esperanza y este temor no son ciertamente los signos del amor y de la entrega verdadera. Los ricos no se aman más que a sí mismos, y si creyeran que pudieran ir al cielo sin el pobre, con mucho gusto tendrían pocas relaciones con él y la menor benevolencia posible. Hacen muy poco por el pobre; no alcanzan a elevarse hasta el don perfecto, como lo pide la verdadera caridad, y si dan mucho es porque se encuentran obligados y forzados por la necesidad. Además, el pobre está desprendido de todas las criaturas; el rico, por el contrario, se apega todavía más. ¿Cómo siendo tan diferentes uno de otro podrán sentir un amor verdadero el uno por el otro? Ahora bien, el rico no tiende a nada tanto como a sí mismo y a las criaturas, ¿cómo sería capaz del amor verdadero? Hay que añadir que la verdadera caridad es completamente espiritual, porque procede del Espíritu Santo: el rico, por el contrario, es totalmente terreno, ¿cómo podría poseer la caridad espiritual? En fin, el verdadero pobre no es conocido por los ricos; no puede, por consiguiente, ser amado por ellos, porque esas dos cosas, conocer y amar se siguen como el efecto sigue a la causa, según las palabras de san Agustín: Se puede amar bien lo que no se ve; pero nadie ama lo que no conoce."
Do sermão de John Tauler, Místico do Séc. XIV dominicano
De facto, quem está cheio de si ou do dinheiro não pode amar....

segunda-feira, setembro 01, 2008

Oriana Fallaci


(desculpem o espanhol mas é bom o texto)

Nació el 29 de junio de 1930 en Florencia, en el seno de una familia muy humilde. Su padre era albañil y tenía tres hermanas, una de ellas adoptada. Cursó estudios medios en su ciudad natal y, ayudada por varias becas, ingresó en la Facultad de Medicina. "Me matriculé en Medicina porque el tío Bruno decía que estudiar Medicina me ayudaría a ser escritora, y en aquel tiempo la Universidad no era gratis: hacía falta costeársela. Luego me quedé en periodismo que me permitía escribir, y a la vez que realizaba los estudios universitarios, escribía pequeños reportajes para un diario de Florencia". Se ha caracterizado por mostrar, tanto en sus obras como en sus artículos y crónicas, un estilo muy personal que roza la provocación y se sitúa siempre en la más plena controversia. Reconocida sobre todo por sus entrevistas a personajes como Henry Kissinger, de quienes obtuvo declaraciones polémicas. Su estilo frontal enfureció a varios de sus entrevistados, como el ayatollah Khomeini, Muammar Khadafy o Leopoldo Galtieri, a quien llamó "torturador". Oriana Fallaci, para sus trabajos, partía de la hipótesis de que en una entrevista lo que cuenta no son las preguntas sino las respuestas: "Si una persona tiene talento, se le puede preguntar la cosa más trivial del mundo: siempre responderá de modo brillante y profundo. Si una persona es mediocre, se le puede plantear la pregunta más inteligente del mundo: responderá siempre de manera mediocre". En 1973, conoció al poeta Alekos Panagulis, un resistente a la dictadura griega que había sido el autor de un atentado fallido contra Yorgos Papadopulos. Panagulis fue el único hombre con el que esta mujer solitaria e independiente convivió durante tres años, hasta el 1 de mayo de 1976, fecha en la que Panagulis fue asesinado en una calle de Atenas. Su recuerdo la llevó a escribir, en 1979, su novela "Un hombre". El Columbia College de la Universidad de Chicago le otorgó la "laurea ad honorem" en Literatura. Fue corresponsal en Vietnam y en la Guerra del Golfo. Colaboró con numerosas publicaciones y escribió varios libros, entre los que destacan: "Entrevista con la Historia" (1974); "Carta a un niño que no nació" (1975); "Un hombre" (1976) e "Inshallah" (1992). En 2003 salió a la venta en Italia, La fuerza de la Razón, editado por Rizzoli Internacional. En la obra acusa a la Iglesia Católica de ser demasiado débil ante el mundo musulmán, y a Europa de venderse al Islam "como una prostituta". Dos años antes, su ensayo "La rabia y el orgullo" provocó acusaciones de que incitaba al odio contra los musulmanes. Con esta obra rompe un silencio de diez años, y lo hace tomando como punto de partida el apocalipsis que la mañana del 11 de septiembre de 2001, no muy lejos de su casa de Manhattan, desintegró las Torres Gemelas y redujo a cenizas a miles de personas. Su último libro, Oriana Fallaci entrevista a Oriana Fallaci, en el que analiza el «cáncer moral que devora a Occidente» y su propia enfermedad. En su autoentrevista, afirma que "tanto el Occidente como Europa e Italia están más enfermos que yo". Y revela que detesta las entrevistas el aspecto más conocido de su trabajo periodístico, por haberlas considerado siempre un acto de violencia, de crueldad hacia el entrevistado. Salió a la venta el 8 de agosto de 2004 junto al diario Corriere della Sera, y en pocas horas se agotaron 500.000 copias .